La ciudad instaló unos urinarios ecológicos que convierten el pis en compost.

No importa dónde esté: en el primer, en el tercer o en el fin del mundo. Casi ninguna ciudad grande se salva del concentrado olor a pis en ciertas calles o rincones.

En Francia, están probando soluciones para revertir este problema. Primero en Nantes y ahora en París instalaron unos modernos urinarios ecológicos que convierten la orina en compost que luego se utiliza en parques y jardines como fertilizantes.

De tamaño rectangular, aparentan ser maceteros y tienen adentro del contenedor paja, aserrín y virutas de madera. Además de regenerarse como compost, el material tiene un alto contenido de carbono que reduce el olor a pis.

Los Uritrottoir fueron colocados en las cercanías de la estación de Lyon, en París y tienen una capacidad para 600 o 300 usos según el tamaño. Cuando el depósito está lleno el sistema emite una señal para que sea recambiado.

“Estamos haciendo compost, que es un fertilizante, así que esto es economía circular. Utilizamos dos productos de desechos, paja y orina, para generar algo que ayudará a crecer a las plantas,” explicó el diseñador del Uritrottoir, Laurent Lebot, en La Vanguardia.

Los contenedores tienen un alto contenido de carbono que reduce el olor a pis.

 

Fuente: TN